jueves, 29 de octubre de 2020

El desalojo y la represión no es la respuesta

 En su lenguaje que habla con las cosas más simples y complejas , en las tierras de Guernica sus corazones sembraron la semilla de la "vivienda digna". Ellxs tienen en sus caras las cicatrices del Capitalismo, que no duda un instante en hacer lo que hace siempre en defensa de la propiedad privada: reprimir .

En jauría , cuando las primeras luces del día se dejan ver, los perrOs hacen la tarea que el AMO ordenó.  Ese AMO que se oculta detrás de la palabra "justicia social "pero que aplica la "justicia capital".

Avanzan y queman las casillas de madera y queman los sueños de dignidad.

Podrán quemar y reprimir, pero la lucha tiene su fuego propio. El fuego de nuestra clase. La que lucha todos los días por un mundo mejor. 

Y ahí, en Guernica y en todas partes el grito es el mismo:" la respuesta a la vivienda no puede ser la represión ".

EllOs avanzan y nosotrxs también. Hasta que esos corazones que luchan tengan su techo propio.

Ilustración: Salo

Facebook: Salo.ilustraciones




martes, 27 de octubre de 2020

Lohana


"En un mundo de gusanos capitalistas, hay que tener coraje para ser mariposa".
Lohana Berkins.


Lohana , la compañera que en su andar escribió un relato colectivo y no individual.  Un relato de lucha de años contra el trans-odio social, porque no es "fobia", es "ODIO".

Lohana gritó al viento su identidad travesti, originaria y abolicionista, comunista . Interpeló directamente al discurso académico blanco de la clase media. 
No dió lugar a esas enunciaciones. Lohana, transformaba esas miserias académicas  y teorías de odio con identidad travesti. Al recordar su experiencia con un psicólogo que le dijo " “Es lo 
mismo que uno venga y me diga que es Napoleón” , ella resignificó políticamente esas ideas del psicoanálisis y cuando le tocaba hablar mencionaba : “Bueno, soy Lohana Berkins, soy travesti y no quiero ser Napoleón”.

Así  era y es Lohana . Una militante contra toda lógica que imponga colonice, oprima, extermine y reprima.

Esa claridad en sus convicciones la llevó junto a otras compañeras , impedir que las mujeres policías participen en Salta ( su provincia natal) del Encuentro Nacional de Mujeres (en esos días aún no era *Plurinacional* el encuentro).  Lohana, sabía  que con la yuta no hay sororidad, porque es la columna vital del sistema capitalista, patriarcal y racista. Ella tenía en su piel las marcas de la represión . Siempre luchó contra el brazo represor estatal. En la década del 90 contra los edictos policiales y luego contra los códigos contravencionales. Siempre supo desde donde se posiciona a en la vida .

Lohana y su pañuelo verde, símbolo de la lucha por el "aborto, seguro , legal y gratuito". Una demanda del feminismo en la que la colectiva travesti entendió como vital en el reclamo de la propiedad del cuerpo como un derecho absoluto. Lohana era clara cuando hablaba sobre la lucha por el aborto, seguro, legal y gratuito:"Me interesa mostrar lo que las travestis, transexuales y transgéneros podemos aportar a la Campaña. Siempre somos las chicas que vamos aportar el cotillón, el show, la diversión ¿no? También producimos saberes, podemos elaborar teoría y, en este sentido, no estamos proponiendo cambiar el eje, insisto, de la cuestión central, vertebral que son las mujeres, sino enriquecer esta Campaña y esta propuesta trabajando temas que hacen a la misma cuestión, como es la de arrancar a los estados, a las corporaciones y a las iglesias la propiedad de nuestros cuerpos".
Luchadora por el derecho a la identidad y por construir las condiciones de un mundo mejor para las niñeces travestis .

Lohana, furia travesti que no frena su andar.  Sus palabras son el horizonte para muchxs de nosotrxs :" El tiempo de la revolución es ahora, porque a la cárcel no volvemos nunca más".


Ilustracion : Salo
Facebook: salo.Ilustraciones



viernes, 9 de octubre de 2020

Veo, veo ¿Qué veo?

 Veo mis ojos buscando la foto de un bautismo y el llanto en primer plano, suspiro de protesta ante un Dios que nos imponen en los primeros días del vivir.


Escucho la voz de esa madre que me viste de celeste y me impide bailar en colores. Violenta, tierna cicatriz en la piel. Y un padre que acompaña el abandono. Se separaran y se asocian en el dejar(me).


Veo mis ojos con guardapolvo blanco, esperando en un pasillo, con el viento con aroma a guerra y a sangrienta dictadura. Y las primeras lecturas descodificadas en historietas de continuará.


Siento ese amor de octubre en las huellas de un horizonte que se dejaba apenas ver, entre canciones y bicicletas en la lluvia. Nada era nada y a la vez todo.


Veo verme. Caminando en un asfalto del barrio que alguna vez fue barro. Donde hacía represas con agua de arroyo y me mojaba con risas de niñez. Y dónde ahora el cemento intenta borrar. Pero la raíz no deja avanzar.


Veo sin respetar cronológia,a unx niñx en un baño escolar, siendo rehén de burlas machistas y tocando penes de hijOs sanOs del patriarcado. Lágrimas sin comprender el borrón de la memoria y décadas después ver en esas paredes  florecer un arcoiris orgulloso que con sus colores le pone música al presente y escupe al odio y sus fantasmas.


Lápiz y hoja blanca trazaron dibujos, después fueron canciones y luego entrevistas con fuego transformador social.


Y llegó el susurrar en voz alta: "Veo, veo ¿Qué veo?" .  Romper el espejo y sangrar con sus cristales y gritar todos los días :" VEO, VEO ¿QUÉ VEO?" ; y desangrar , desatar la única certeza: veo lo que no es . Señal para seguir avanzando en ese coser y descoser del ser.